domingo, 29 de marzo de 2015

Experiencias - "Necesito ver caras diferentes y que la gente no me recuerde que estoy enferma"

"Son días largos y duros los que me esperan hasta la meta. Tres semanas encerrada en casa, hace que la mente se cierre y llegue apagada a una sesión de quimioterapia tras tanta exposición al dolor puro y duro.

Vale más una conversación, una mirada, una sonrisa, una caricia, una pequeña acción... que ver la tele, leer, escribir, escuchar música, ver películas, ponerse guap@ o tener todo a tu alcance cuando permaneces encerrad@ día tras día viendo tus sueños pasar sin poder cumplirse."



Gracias le dije ayer sábado a un gran amigo del pasado que me enganchó a la radio para poner música porque veía que tenía una gran colección en mi casa y que era insaciable en ese mundo. Recuerdo aquella vez que conecté con "Radio Barcarrota", que por aquel entonces era "Onda Barcarrota", estaba moviéndome entre las redes y la informática a través del "NCC de Barcarrota" cuando tenía 16 añitos. Llegó José Luis González y se encontró con un  CD de una artista actual en el 1999 y del que la emisora no disponía por los pocos ingresos que recibía. Así entablamos conversación por primera vez. Él me pidió que se lo dejara y no puse objeción. Hablé de lo que me gusta ese mundillo y le mencioné tantos artistas actuales y pasados, que me invitó a entrar algún día a la emisora para perderme por los archivos de CD's y casetes que habían por allí. Así hice. Todo cambió, y empecé a visitar la Casa de la Cultura para mis trabajos del cole, el NCC y conocer el mundo de la radio locución. Ya ha llovido mucho desde entonces. Todavía me sigo riendo de cuando me dijo que tenía que pinchar música. ¡Jamás olvidaré esta historia amigo!Como todos los buenos amigos, hemos tenido nuestro rifirrafe, pero las buenas amistades perduran cuando se encuentran y se enfrentan en sus diferencias. Sigo riéndome de cuando me dijiste que tenía que hablar por el micrófono porque todo el mundo te preguntaba quién ponía esa música tan variada y diferente a la de siempre. Te dije que ni loca hablaría por el micro, que me pondría muy nerviosa. Dios... que gran aventura esa la de presentar por primera vez... Daría lo que fuera por volver y sentir esas sensaciones. Me temblaban las piernas y la voz, pero una vez lo pruebas es imposible soltar ese micro, al igual que la mesa de control. Si era una enamorada y apasionada de la música, poder enlazarla y controlarla a través de las ondas con palabras llenas de amor y energía era el mejor regalo que pude recibir. Para mí ir a la radio y poner música se convirtió como un hobby más, nunca supe lo mucho que me gustaba hasta que me sentí atada y limitada a la hora de abrir puertas en otros lugares, así como la ocasión de perder para siempre la emisión en "Radio Barcarrota". A medida que fue pasando el tiempo e iba buscando ser feliz haciendo lo que más me gustaba, me encontraba que los peores días de mi vida no tenía ganas de ir a la emisora para poner música y hacer sonreír a la gente, pero esos días que iba sin ganas y que me daban ganas de ir directamente a casa para dormir eran los mejores. Pensaba en que aunque sólo hubiese un oyente que me escuchara, tenía que cumplir con mi programa para sacarle una sonrisa porque se lo merecía. Esos días no sabía ni qué música poner por mi falta de tiempo para preparar los programas, pero al final, llegaba a la emisora y lo organizaba en 5 minutos, me dejaba llevar y al cuarto de hora estaba volando sin querer aterrizar. Cuando llegaba el final del programa no quería irme de allí. "Onda Nostálgica", así se llamaba el programa cuando comencé. Siempre ha sido mi salvación. Ese nombre se lo dio José Luis, hasta que con el tiempo evolucionó y no sólo se escuchaba música y se conocía al artista, sino que llevaba un aporte más psicológico y necesitaba un nombre diferente. Tras su evolución a "Tempomusic", hubo otra amistad que lo rescató para llevarlo algo más lejos de Barcarrota, "Onda Campus", la radio universitaria de "Comunicación y Audiovisuales en Extremadura". ¿Que cómo llegué a ese lugar? Pues porque la vida te va dirigiendo y colocando hacia el lugar al que perteneces y debiste ir antes, pero los soñadores nos pasamos la vida soñando a lo grande y nos perdemos por tantos que nos olvidamos del más importante. Venga, te contesto a la pregunta. Llegué allí gracias a un "Encuentro Juvenil" al que me invitaron las personas que trabajaban por aquel entonces en el "NCC de Barcarrota" y que sabían lo mucho que me gustaba la radio. Estas personas me invitaron al taller de radio y disfruté como una enana en el por el año 2008 gracias a otros apasionados de la música y de la radio. Recuerdo que Marcos Casilda y Ana Grajera me invitaban a estudiar la carrera, pero tenía tantas responsabilidades y tanto miedo a fallar, que no me atrevía a dar ese paso tan grande de romper con esas responsabilidades y dar un giro a mi vida. A veces te ves tan diminuto ante un sueño, que lo aparcas por miedo. He aparcado muchos por temor a no llegar a la meta que me proponía, pues siempre he sido muy exigente y estricta conmigo misma. Ese encuentro juvenil, me llevó a solicitar ayuda para mi programa a Marcos, necesitaba pulir y corregir defectos que desconocía. En esas escuchas y correcciones me propuso llevarlo al lugar en el que él trabajaba. Poco a poco ha ido creciendo mi pasión por la comunicación en la radio. Jamás fui consciente de lo mucho que me gustaba. 

Ayer recordé todos estos momentos gracias a José Luis y le di las gracias por dedicar parte de su tiempo en salir a pasear, aunque no tenía fuerzas, con una casi treintañera que parecía tener 90 años porque le costaba dar paso. Recordando viejos tiempos reíamos y conseguía andar cada vez más fuerte, pero lo que más ayudaba, era el compartir risas con alguien que siempre te ha apoyado y empujado en tus primeras pedaleadas hacia tu sueño inconsciente, con quien has compartido penas y alegrías. Son muchas las personas que han aportado su pequeño granito de arena en mi crecimiento y madurez. En la vida uno no puede ser por sí solo, necesita al resto para nutrirse y crecer. El que diga lo contrario o piense que sus logros han sido por su propia cuenta, está bien equivocado. 

Esta enfermedad es un gran aprendizaje, así me lo tomé desde que supe de su existencia. Lo mejor que tiene, es que te ayuda a equilibrar más todavía todo lo que has vivido. Te ayuda a ser consciente de que cada paso  que has dado en la vida ha sido el correcto aunque otras personas te dijeran lo contrario. Cada uno vive la vida como la siente, y los sentimientos a veces nublan la razón, por tanto, sólo el tiempo es el que equilibra esa balanza. Mi balanza se está equilibrando como nunca. Gracias al cáncer, estoy viendo las grandes amistades que he cosechado a lo largo de mi vida. Estoy agradecida a todas esas personas que están dedicando parte de su tiempo para ayudar a levantarme en este camino tan largo y duro que desconocen pero que tratan de comprender con su paciencia.



Paciencia... La paciencia es la madre del la ciencia, y esa es la que he necesitado desde el 8 de Marzo hasta este domingo día 29 de Marzo. Por primera vez sentía que me ahogaba en mi pena por querer salir de estos días grises que nunca terminan. No he tenido tiempo para que mi mente respire y se despeje de tanto dolor físico y mental.


  • Físico: Por recibir quimioterapia el 9 de Marzo con antibióticos a consecuencia de un resfriado y así ayudar a cuidar de la herida que me creó el reservorio para la cual tuve que recibir puntos antes de iniciar la sesión, además de llevarme la noticia de que me pincharían por primera vez las defensas que se bajaron por ese dichoso resfriado. Por la intevención que me realizaron el 18 de marzo para supuestamente recolocar el reservorio, pero que  me querían poner en el lado izquierdo porque la piel del derecho estaba en mal estado y se podía infectar, así que decidieron crear una nueva cicatriz por prevenir ygracias a la consecuencia de que en su momento no me lo pusieron las personas indicadas en el lugar indicado. Por las diarreas que no han cesado durante dos semanas y que me han hecho bajar el doble de peso que pierdo con la quimio, pues terminé con los antibióticos el 15 de Marzo, pero tuve que tomarlos 5 días más tras la intervención del reservorio para evitar su infección. Por los dolores de espalda a consecuencia de la quimmio que no me permiten conciliar bien el sueño más de una noche. Por los calambres que me impiden mover las manos y los pies con la facilidad que lo hacia antes.  


  • Mental: por todas las emociones que tienes que ingerir y equilibrar tan rápidamente cuando sufres ese dolor físico tan seguido para tratar de mantener equilibrada la mente y que ayude a limpiar y aliviar tanto sufrimiento inesperado. Por tener que aceptar que esos calambres en las manos te privarán del sentido del tacto durante las sesiones de quimio y unos años más, además de acostumbrarte a esa mala percepción en tus dedos a la hora de escribir en un teclado, abrochar una camisa, preparar la comida y otras cosas importantes como acariciar a una persona o a tu mascota para transmitir paz y amor. Por tener que aceptar un dolor de espalda durante años para poder sobrevivir. Por ver como otras personas siguen con sus vidas mientras tú tratas de salir a flote para recomenzar de cero habiendo tenido cosas maravillosas que fueron detenidas sin más. Por ver como tu cuerpo se destroza para sobrevivir y hacer como si todo estuviera bien. Por querer comer sin ser capaz por los asquillos y ver como tu madre trata de hacer todo lo posible porque comas tratando de encontrar algún plato que me abra el apetito. Por tratar de evitar que mi familia me vea triste porque si yo caigo, ellos se hunden mucho más.
  
     Esta es una forma de desayunar aunque no se tenga ganas.

    Si te das color por fuera, se ilumina el interior y se desvanece el dolor.

    Son muchos los trabajos y esfuerzos diarios que hago tanto con mi cuerpo como con mi mente. Por eso pido y solicito que cuando salga a la calle no me preguntéis cómo estoy, pues me recordáis el gris de mis días y me hacéis pensar en que estoy enferma. Para recordarme que estoy enferma está el dolor, y prefiero reírme de él a llorarlo porque con el llanto puedes hogarte si te pasas de la raya. Para curarte y sanar antes, es mejor sentir que ya lo estás, por eso, cuando salgo a la calle con la sonrisa dibujada en mi cara tras el dolor recibido en el día, lo hago pensando que estoy sana y bien. Ayudadme a sonreír cada día, pero no tratéis de arreglar con palabras en segundos lo que es mi trabajo de semanas. "Ya queda poco" son palabras que me hieren mucho porque no sabéis el gran trabajo que me falta antes, durante y tras la operación. Acompañadme en este trayecto y compartir vuestras experiencias así como yo lo hago por aquí, pero por favor, durante el viaje no me preguntéis por el trayecto, esperad al final y será mucho más grata la conversación.

    Hoy domingo, al igual que ayer sábado, eran días que tenía que permanecer tumbada pues al cuarto día de recibir la quimio suelo estar por los suelos, pero la noche del martes me prometí que aunque estaba de capa caída mentalmente, tenía que ser fuerte físicamente para estar más activa. Debo decir que me tuvieron que aplazar el tratamiento del lunes 23 al miércoles 25 de Marzo para que la herida del reservorio cicatrizara bien. La foto en la que me ves bien coqueta y algo alegre la he conseguido tras haber pasado horas de dolor en el sofá con la espalda, vientre y estómago; tras haberme duchado floja y sin fuerzas para tratar de lavar y relajar todo sufrimiento y moverme poco a poco. Un mensaje a un amigo solicitando que me sacara de Barcarrota para oxigenar mi mente por permanecer encerrada tanto tiempo cambió la tarde. No tenía fuerzas pero las risas y buenos momentos creados en lugares inesperados han hecho que me sienta bien física y mentalmente. Necesitaba ver caras y lugares diferentes a los que suelo ver los días que lo estoy pasando mal para olvidar todo el dolor. La terapia ha sido muy buena, pues aquí ando escribiendo nuevamente. Hasta que no digiero las emociones, no las escribo, pues no me gusta soltar hasta que he curado, para que veáis los resultados obtenidos por mi cuenta y con el apoyo que recibo cada día. Son muchas las personas a las que debo dar las gracias durante estas semanas, pues han sido bien oscuras, pero entre mí fortaleza y la que me empujan a tener todas las personas que me rodean, he podido seguir adelante.


     Una de las muchas amistades a las que le tendré eterno agradecimiento por iluminarme cuando tengo miedo.  


    He llorado por la incompetencia de muchas personas encontradas en este camino que han retrasado el progreso y sanación en esta enfermedad, pero también me he encontrado con grandes profesionales que se han preocupado de que nada me falte. Jamás olvidaré a Ana Nieves, la cirujana que me operó el 5 de Septiembre y que me dió los puntos para apañarme la herida del reservorio para que así pudiera recibir la quimioterpia ese mismo día; que también estuvo antes de que me entraran a quirófano para ser operada por otro cirujano y que vino a despedirse de mí llena de alegría, porque aunque me dijo que ella no podría operarme, estuvo en la intervención y pese a que estaba sedada y dormida, me di cuenta de que estaba allí porque reconocí su voz. No sabía que pregunté si estaba ella en la operación en cuanto la escuché, a saber qué más diría durante la intervención para que viniese tan contenta y me abrazara. Ya hablaré de todos esos profesionales que han contribuido a que mi batalla contra el cáncer sea más efectiva. Hace tiempo dije que tenía que escribir una carta a los periódicos de Extremadura para enviar mi agradecimiento, pero es que la lista es y va a ser tan grande, que es mejor esperar al final para hacerles un reportaje y homenaje a todos los que han sido humanos y cercanos a la hora de realizar su trabajo. 

     ¡Por favor, recuerda hacerme sonreír cuando me veas!




    Como broche final, te dejo una canción con energías cuya letra me viene muy bien en la actualidad para la batalla que llevo librando durante meses sin a penas poder respirar. ¡Hay que sonreír siempre!El dolor físico es menor que el emocional, y el emocional siempre puede controlarse con un cerebro abierto. ¡Abre tu mente!


    "Looking for my ticket to a higher place, I can see my chance begin to fade.One step forward and two back again. I wish the wind would carry a change. = Buscando mi billete para un lugar más alto, puedo ver cómo mis oportunidades de desvanecen, un paso hacia delante, dos hacia atrás, desearía que el viento trajera un cambio.... Y cambiará eso es seguro. = En esta parte, actualmente me siento muy pero que muy identificada, pues en mi caso, se cumple lo siguiente: ando buscando un billete hacia algo mejor que mi situación actual con la enfermedad, de acuerdo en esto, pues luego me encontraré en un punto más elevado debido a que he vivido las limitaciones de una persona anciana cuando se va viendo cada vez más limitada. Pero también está que doy un paso hacia adelante y luego son dos hacia atrás para volver a dar otro paso hacia algo bueno (un proceso lento en el que recibo más de dos palos para uno bueno, ahí puedes visualizar eso dos pasos hacia atrás y uno hacia adelante que puede ser más fuerte que esos dos hacia atrás, todo depende del prisma desde donde se mire). Ejemplo: me dan una noticia que me lleva hacia algo mejor, pero esa meta está muy lejos y se complica la situación cuanto más cerca la tengo. Existen oportunidades que tuve seguras en un pasado y que en un futuro pueden desvanecerse. Necesito un cambio, lo estoy trabajando y es seguro que llegará."

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